En el crucifijo
Ningún símbolo de la fe católica trae mayor esperanza y adoración que el crucifijo. En la fe católica, el crucifijo es mucho más que una cruz que no representa el cuerpo de Cristo en ella. Esto no quiere decir que los católicos no veneren la cruz como símbolo sagrado, pero teológicamente hablando, el crucifijo está mucho más alineado con las enseñanzas de los Apóstoles. El Crucifijo es la imagen de la fe católica como enseñó San Pablo : “Pero nosotros predicamos, Cristo crucificado...”[1] porque en esta imagen está el Cuerpo de nuestro Señor que murió por nosotros. Se diferencia de las cruces en que la cruz está desnuda sin el Cuerpo de Cristo sobre ella. Podemos ver el crucifijo en muchas formas, como crucifijos de pared o de escritorio o incluso en un Rosario. Muchos dirían que la cruz por sí sola simboliza a Cristo resucitado y esto, por supuesto, es increíblemente importante, pero la síntesis de nuestra fe tiene que ver con la redención. La salvación sólo se puede obtener mediante el sacrificio de Cristo en la cruz. Por tanto, llevar el Crucifijo es una manera piadosa y devota de reverenciar a nuestro Señor. Simplemente, ¡nosotros los católicos usamos crucifijos porque fuimos salvados por Jesús y no simplemente por una cruz !
Para un católico, usar un crucifijo es una manifestación externa de su fe en la victoria de Cristo sobre el pecado, la muerte y la tiranía de Satanás. Esto no quiere decir que los católicos sean supersticiosos, sino que lo usan con fe sabiendo que es el símbolo del poder que Dios ha obtenido sobre lo demoníaco. Todo católico que se atiene a las Doctrinas de la fe sabe que no es negociable decidir si Satanás y sus huestes apóstatas existen o no. Pero esta fue la razón por la que Jesús vino a nosotros; Nuestro Señor Jesús vino para habitar entre nosotros, tomando forma de esclavo del pecado, aunque nunca tocado por el pecado, para ser usado como sacrificio sin mancha para la redención del mundo. Además del Misterio Pascual de Nuestro Señor, el crucifijo también nos muestra el costo de la reparación y la redención. Sin embargo, comprenda claramente la diferencia entre redención y salvación porque ¡no son lo mismo! Cuando Cristo murió en la cruz, el mundo, aunque la mayoría de los incrédulos y paganos fueron redimidos o, en otras palabras, elevados a la posibilidad de la salvación. Porque ningún hombre podría entrar al cielo antes de que Jesús voluntariamente diera su vida para que pudiéramos tenerla; si recuerdas, aquellos que murieron en la misericordia de Dios antes de que Jesús fuera al Seol, o la morada de los muertos. Pero fue en este mismo momento que Cristo dio su vida y murió en la cruz cuando tuvimos la oportunidad de vivir. Sabemos que Su resurrección también fue gloriosa al abrir el camino hacia la Esperanza Bendita, o nuestra resurrección si nos negamos a nosotros mismos, tomamos nuestra cruz y lo seguimos diariamente.
Sin embargo, esto no significa que llevar una simple cruz niegue esta fe. De hecho, hay muchas cruces diseñadas culturalmente que no tienen representado el cuerpo de Cristo y que en realidad significan una enseñanza católica asombrosa. Por ejemplo, la Cruz de Jerusalén , que consta de una gran cruz central y cuatro cruces griegas más pequeñas (una cruz con cuatro brazos iguales, similar a un signo más) en cada cuadrante. También se la conoce como la Cruz Cruzada, que data de los siglos XI y XII , cuando Jerusalén fue liberada de la tiranía islámica ortodoxa en 1099. “Uno de los líderes de las Cruzadas, Godofredo de Bouillon, fue el primero en usar la Cruz de Jerusalén como símbolo distintivo del nuevo estado cruzado, conocido como el Reino Latino de Jerusalén. De Bouillon creía que la cruz simbolizaba a Jesucristo y la ciudad de Jerusalén, que es la raíz del cristianismo”. Aunque, también se creía que la Cruz de Jerusalén representaba varias cosas. Por ejemplo, algunos historiadores creen que las cuatro cruces griegas más pequeñas que rodean la gran cruz central representan los cuatro evangelios según Mateo, Marcos, Lucas y Juan; mientras que otros historiadores creen que las cinco cruces (la grande en el centro y las cuatro más pequeñas que la rodean) simbolizan las cinco llagas de Cristo.
De cualquier manera, no puedes equivocarte al usar el Crucifijo o la Cruz. Lo que importa es nuestra alineación con la fe que Cristo estableció. La cruz/crucifijo es de hecho un símbolo sagrado que todos los cristianos pueden venerar fácilmente, por lo tanto, al contemplar cualquiera de los símbolos, asegúrese de contemplar devotamente la gloria de Cristo nuestro Señor en Su pasión, muerte y Resurrección. Amén
